RESUMEN:
Los accidentes de tránsito constituyen un grave problema de orden social y salud pública a nivel mundial. No sólo por las cifras de fallecidos y heridos, sino también por las incapacidades psíquicas que pueden sufrir aquellos que sobreviven a un accidente grave.
Los traumatismos causados por el tránsito provocan homicidios y lesiones graves y gravísimas, no sólo físicas. Las lesiones psíquicas en las víctimas sobrevivientes presentan secuelas de distinta gravedad.
En este trabajo se analizan las consecuencias psíquicas del complejo accidente-trauma y el Trastorno por Estrés Postraumático, en el que las víctimas de accidentes de tránsito configuran un grupo de alto riesgo para padecerlo.
Asimismo, se reflexiona sobre el rol del Estado -y del Derecho Penal- en materia de seguridad vial, y en nuestra responsabilidad como actores viales.
Se publicará automaticamente
Desactivado
Comentar