Doctrina
Ago
09
2017

Victimización de los delitos de odio. Aproximación a sus consecuencias y a las respuestas institucional y social

La conformidad y la tolerancia respecto a los
estereotipos y los
font-family:"Arial",sans-serif;mso-fareast-font-family:Calibri;mso-fareast-theme-font:
minor-latin;color:#222222;mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:EN-US;
mso-bidi-language:AR-SA">

prejuicios han contribuido a desensibilizar a
una sociedad que busca


en “los otros” la justificación de sus propios
problemas. Los rumores


y el discurso de odio estimulan una intolerancia
que termina


desembocando, en muchas ocasiones, en actos
discriminatorios o en


delitos de odio. La gravedad de estos hechos
viene determinada porque


la discriminación

transgrede principios como la igualdad ante la
ley, la igualdad de


trato o la igualdad de oportunidades, mientras
que los delitos de odio


atacan al principio de dignidad, es decir, al valor
de la persona como


tal, y a la universalidad de los derechos
humanos y los principios que


estos contienen. Frente a estos delitos la
sociedad ha comenzado a


reaccionar mediante la creación de asociaciones
que a veces se agrupan


en redes para optimizar los recursos económicos,
sociales y jurídicos.


También las instituciones son conscientes de la
necesidad de actuar


rápidamente para preservar la integridad de las
víctimas que a menudo


se enfrentan a la doble circunstancia de ser
simultáneamente


“víctimas de riesgo” y “víctimas especialmente
vulnerables”. A nivel


social e institucional, los principales temas
pendientes para combatir


esta lacra son: sensibilización, concienciación
y formación.


Descargar archivo

Comentar