Los enfoques tradicionales acerca del
abolicionismo penal, suelen
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mso-fareast-theme-font:minor-latin;color:#222222;mso-ansi-language:ES;
mso-fareast-language:EN-US;mso-bidi-language:AR-SA">designarlo como una corriente radical dentro de
la criminología
crítica. Evitando estas restricciones, en este
trabajo se lo analizará como un proceso ético y subjetivo que se
despliega en tanto práctica
política de la economía del deseo (abolicionismo
molecular). Llegaremos a sostener que es a partir de la
pérdida de los nombres
propios cuando resulta necesario abrirse a las
multiplicidades intensivas, escapando simultáneamente a
dispositivos dominantes de
significación. En otros términos, que uno llega
a proyectarse como abolicionista molecular –o criminólogo menor- en
tanto y en cuanto no
posea ni la responsabilidad del criminólogo
tradicional 1 , ni la culpa del criminalizado.
Doctrina
Abr
23
2017
La isla desierta: el abolicionismo como un posible
Por: Ezequiel Kostenwein
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