A pesar de existir un fuerte consenso a nivel internacional respecto a que el consumo no es un asunto de índole penal sino uno de salud, las respuestas de los Estados latinoamericanos frente a los consumidores de sustancias de uso ilícito continúan siendo predominantemente punitivas y represivas. Este texto explora los mecanismos legales que facilitan y explican la criminalización de los usuarios. El texto muestra que la regulación de la posesión o tenencia es fundamental no solo para entender la situación actual de los consumidores sino también para sacarlos de la esfera penal.
Doctrina
Mayo
03
2016
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